top of page

📔 02 de Julio 2025

Actualizado: hace 4 días


Hoy quiero escribir sobre vos, hijo mío.

Sobre esa frase que me dijiste al final del día, cuando ya estábamos cansados, pero contentos:

"Estos dos días han sido bonitos..."

Y ahí, en esa frase simple, cabía todo lo que vengo sosteniendo con las manos vacías.

Ayer te llevé al cine.

Hoy fuimos a ver el partido y a comer algo rico.

No son grandes lujos, pero para vos fueron un respiro.

Y para mí, escucharte decir que: "fueron días bonitos"... fue una caricia al alma que a veces ya no siente nada más que cansancio.

Sé que la ansiedad y la tristeza siguen ahí, que el estrés te pesa en el cuerpo chiquito que todavía no tendría que cargar con tanto.

Pero por un momento, aunque fuera breve, sonreíste. Viviste. Disfrutaste.

Sí, estoy endeudada.

Sí, me desvelo pensando cómo pagar las terapias, las medicinas, los gastos.

Pero si algún día te preguntas por qué lo hice, por qué no descansé, por qué me esforcé más de lo que podía...

Fue por esto.

Por esos momentos en los que pude regalarte un pedacito de infancia sin dolor.

Mi amor por ustedes es lo único que me sostiene.

Y aunque a veces siento que no alcanzo, mientras pueda darles días bonitos...vale la pena.


"Estos dos días han sido bonitos..."
"Estos dos días han sido bonitos..."


📔 – “Mi niña que cuida mientras juega”

Hoy también quiero escribir sobre vos, Ashley.

Porque sé que creés que no lo noto...pero yo te vi.

Te vi ayer, mientras estábamos en el restaurante.

Sabías que tu hermano quería disfrutar del partido, porque el fútbol es lo que lo hace sonreír un poco más cuando los días son grises.

Y vos, sin que nadie te lo pidiera, fuiste a jugar con Sidney.

Primero en los juegos, sola, mientras tu hermano miraba el partido.

Después, cuando unos niños más grandes no dejaron subir a Sid, trampolín,

no hiciste berrinche.

Te levantaste, tomaste a tu hermanita de la mano, la columpiaste, y después la ayudaste a subir al trampolín.

Te quedaste con ella ahí, protegiéndola y jugando.

Y yo solo te observaba, viendo cómo esa alma que hace poco estaba tan opaca, ahora va volviendo a brillar.

Sé que quisiera verte más niña, que jugaras sin preocuparte por cuidar, que no tuvieras que madurar tan rápido.

Pero agradezco, de corazón, esas pequeñas grandes ayuditas tuyas:

cuando cuidás a Sidney para que yo pueda comer tranquila,

cuando dejás tu propio juego para proteger a quien más lo necesita.

Mi princesa...No solo sos mi hija.

Sos un ejemplo de amor para tus hermanitos.

Y eso, aunque a veces te pese, es parte de la luz hermosa que llevás dentro.


Shini, hoy nos diste muchos besitos, pero al final del día quisiste ir en el carro con tía plaudia y tía kiki... todos te amamos :)


Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page